La implementación de la gestión basada en el valor

La gestión basada en valor (VBM, por sus siglas en inglés) toma cada vez más relevancia en el ámbito empresarial. Este nuevo enfoque, que tiene como objetivo mejorar el desempeño de las organizaciones y aumentar su rendimiento, también ha llegado al ámbito de la salud. Justo ahora, se cumple un año desde que la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA)  de España, pusiera en marcha un sondeo para conocer la percepción que estos profesionales tienen sobre esta filosofía de gestión y que, en palabras de su presidente, José Soto Bonel, “pretende convertirse en punto clave en el Sistema Sanitario”.

Además, también ponía de manifiesto que, “la atención sanitaria basada en valor es una tendencia analizada desde hace tiempo, pero hemos de trabajar también para implementar la gestión sanitaria basada en valor, que supone que, a través de la organización de procesos, recursos, etcétera, se aporta calidad, eficiencia y sostenibilidad en todos los servicios que una organización sanitaria presta”.

 

El papel de la tecnología en esa puesta en valor

Tal y como comentamos al hablar del impacto y la eficacia clínica de las soluciones digitales en los procesos sanitarios, tecnologías como la Inteligencia Artificial o el Machine Learning están impulsando en los últimos años una ola de innovaciones sanitarias que sitúan a los ciudadanos en el centro de todo y que, además, ofrece beneficios a pacientes, profesionales y administraciones sanitarias, permitiendo un abordaje de la salud integral, más allá del vínculo con los avances tecnológicos.

En este sentido, el presidente de SEDISA explicaba “en la actualidad, debido a la gran importancia que está adquiriendo la evolución de lo analógico a lo digital, los datos juegan un papel crucial en el Sistema Sanitario, no solo permitiendo medir con indicadores de proceso, sino también permitiendo la implementación de la estrategia de resultados en salud en la gobernanza de las organizaciones sanitarias. Los directivos de la salud deben ser palancas para conseguir que esta evolución se realice con la mayor calidad posible”.

En esa búsqueda de la calidad y, sin perder de vista la gestión basada en valor, un software de gestión como Aurora Tele Q juega un papel fundamental, ya que ayuda a garantizar una organización más eficiente y eficaz. Además de ofrecer a los diferentes centros sanitarios la opción de rellamada para sus pacientes y mejorar, por tanto, la comunicación entre centros de salud y usuarios, también facilita la gestión de tareas entre los distintos departamentos.

La recogida de datos que realiza Aurora TeleQ permite planificar las franjas horarias de un centro sanitario y conocer de antemano los días y horarios en los que se producen más llamadas. De esta manera, los responsables de cada departamento pueden organizar los turnos de trabajo de sus profesionales y reforzar aquellos en los que la presión telefónica se ve incrementada. Como consecuencia, se reducen los tiempos de espera, es posible una conversación más corta y fluida y, por lo tanto, una respuesta más rápida y efectiva.

Un sistema como TeleQ ayuda al usuario y a todos los actores implicados en un uso responsable y eficiente de la Sanidad: mejora la atención al paciente, facilita la organización de los recursos de una manera más eficiente, reduce el estrés y el burnout de los profesionales y permite una planificación de los recursos, técnicos y humanos. Tal y como comentaba José Soto Bonel, “los datos tienen un papel crucial en el Sistema Sanitario”. Disponer de datos que aportan valor permite una evaluación mucho más rigurosa y precisa, tanto de la atención que se le presta al paciente, como de los procedimientos que los distintos profesionales de la salud llevan a cabo en su día a día y favorece esa transformación hacia una modelo de Atención Primaria fundamentado en la gestión de la salud, más humanizado y centrado en las personas.

Una transformación digital, “que no es lo mismo que digitalizar”, subrayaron los expertos del sector sanitario que se dieron cita en el último congreso de SEDISA. Otra de las principales conclusiones que se extrajeron durante la jornada es que el sector de la salud se encuentra inmerso en una etapa de humanización de sus directivos y que ello conlleva, tal y como afirmaron “que tengamos que ser los líderes de este cambio digital sanitario” beneficioso para profesionales y pacientes.